SATURNO
ASTROLÓGICO Y LOS CICLOS DE LA MADUREZ HUMANA
Por
Juan Carlos Pons López
¡Saludos Amigo
lector! Esta semana traigo para ti un tema que resulta sumamente útil: te
permitirá comprender que la madurez humana no es algo que ocurre de forma
instantánea, sino que va ocurriendo por fases o ciclos. Y astrológicamente,
quine rige estos ciclos es el planeta Saturno. En este artículo hacemos un
paseo -de carácter general por supuesto- por el significado de cada uno de
estos ciclos definidos por el planeta Saturno. ¿Te interesa? ¡Acompáñame!
Saturno, el señor de
los anillos, el sexto planeta del sistema solar, el segundo en tamaño y masa
después de Júpiter y el único que tiene un sistema de anillos que es visible
desde la Tierra.
Su nombre proviene
del dios romano Saturno y en la mitología griega era conocido por Kronos. Forma
parte de los denominados planetas exteriores o gaseosos. El aspecto más llamativo
de Saturno son sus brillantes anillos.
En todo caso, los
anillos forman parte de la comprensión de la naturaleza de Saturno. Su ciclo
visible en la eclíptica alrededor de la
Tierra es de aproximadamente 29 años y medio.
En la mitología
romana, Saturno es representado como un anciano con larga y espesa barba
blanca, con una hoz en la mano. Es el emblema del tiempo y lo simboliza como
algo muy antiguo que todo lo destruye y acaba.
Saturno representa el
principio de concentración, del orden, contracción, inercia y abstención. Es
frío y triste. Representa la vejez, con todo lo que tiene de negativo y de
positivo. Símbolo del tiempo, del reloj de arena. Es pesimista, busca la
soledad. Símbolo de la tradición y de lo conservador. Es intransigente. También
representa las estructuras.
En la carta natal
astrológica, rige la disciplina, las pruebas y los obstáculos. Incita a la
seguridad, la prudencia, la reflexión, la estabilidad, la madurez, la
consolidación y la limitación. Símbolo del deber y del trabajo, de la
responsabilidad, de la paciencia, la persistencia, la seriedad, el temor, la
preocupación, la codicia. Representa la sabiduría adquirida por experiencia y
representa a la experiencia misma. También es un símbolo de la figura paterna
desde las funciones de la prohibición y el cuándo si y cuándo no. También está
muy relacionado con aquello que en la Enseñanza Hermética le llamamos la falla en el desde dónde hacemos lo
que hacemos.
Ahora bien, tomemos
el significado de Saturno como principio de la madurez y hablemos de sus
ciclos. Saturno tarda entonces 29 años y medio en recorrer los doce signos,
esto es un gran ciclo, y promedia unos dos años y medio en cada signo. Sin embargo, los ciclos a los cuales me referiré
en este artículo son los cuartos de ciclo –es decir, cada paso por tres signos,
o cada vez que hace ángulos de 90 grados o 180 con respecto al Saturno natal- y su duración es
aproximadamente unos 7 años y fracción. Se les conoce como los septenios y
coinciden con otros ciclos del planeta Urano.
Desde 0 hasta 7 años
Representa la edad
infantil, en la cual las estructuras psíquicas en el niño pequeño se comienzan
a formar a partir de las de sus padres, sus profesores del colegio, la
sociedad, la música, sus amigos, el ambiente social, político, económico de su
entorno. Es entonces la época de la programación inconsciente de la que habla
el Hermetismo.
Desde 7 hasta 14 años
Representa la época
de pasar de la niñez hasta la adolescencia, la época del desarrollo de las
estructuras mentales, físicas, sicológicas, descubre el mundo intelectual,
descubre la diferencia entre los chicos y las chicas e inicia su desarrollo
sexual.
Desde 14 hasta 22
años
La época del final de
los estudios básicos y el inicio de la experiencia universitaria, el paso por
la mayoría de edad, la juventud plena, el desarrollo de una mayor madurez tanto
como persona como desde las relaciones humanas, época de noviazgos, de asumir
algunas responsabilidades –desde que materias inscribo hasta cómo manejo un
carro o con qué deseo contribuir a la sociedad en la que vivo a nivel de una
profesión-. Posiblemente aún dependemos de nuestros padres, pero buscamos ir
estructurando nuestra propia vida. Rebeldía, metas, deseos, planes a futuro.
Desde 22 hasta 29
años
Época de mayor toma
de conciencia y de responsabilidades, quizá estemos casados o tengamos hijos, o
un trabajo. A los 29 años aproximadamente ocurre el tan famoso retorno de
Saturno. En esta época estamos dando cierre a un ciclo y todo lo caduco debe
dejarse atrás. Es el inicio de la edad adulta como tal, más allá de la mayoría
de edad, es una adultez joven pero más plena y consciente de nuestros límites.
Desde 29 hasta 36
años
Época de poner a
prueba las estructuras propias de vida que creamos en los primeros 29 años.
Cuestionamos nuestra vida, nos vemos ya como adultos y que ya no podemos seguir
viviendo como adolescentes, tenemos responsabilidades adquiridas por nuestra
propia voluntad que forman parte de estas nuevas estructuras y que no podemos
botar abajo. Es tiempo de tomar riendas de nuestras vidas, los temas de
religión, libertad, derechos, y el sistema de valores es puesto en tela de
juicio por nosotros mismos.
Desde 36 hasta 43
años
La famosa crisis de
los 40 años. Nos damos cuenta cada vez con más claridad del paso del tiempo.
Normalmente surgen crisis de pareja o de relaciones humanas en este momento, ya
que en ese momento de la vida las estructuras del otro y las nuestras conviene
hacerlas encontrarse en un punto de integración.
Desde 43 hasta 50
años
Inicio del declive de
la vida, cambios físicos más marcados, análisis de si hemos logrado las metas
de la juventud. Etapa de aceptación de aquello que hemos logrado construir y de
disfrute de lo alcanzado.
De 50 hasta 58 años
El segundo retorno de
Saturno de los 58 años. Se cierra el ciclo de la edad madura e iniciamos la
tercera edad de la vida. En algunos casos puede ser un reinicio de ciertas cosas en la vida, tal vez
edad de dejar de trabajar, o de enviudar, o un divorcio o separación, la muerte
de nuestros padres o ya nuestros hijos pueden estar haciendo su vida y ya casi
no los vemos. Es un renacimiento, pero puede poner al des nudo nuestra falta de
madurez en algunos aspectos de la vida.
Desde 59 en adelante
Se vive de lleno la
tercera edad. A veces, con limitaciones físicas evidentes, pero en realidad la
verdadera cosecha, la etapa donde podemos ver más claramente y concretamente
las funciones de Saturno en nuestra vida. El fruto del empeño laboral de años,
el reconocimiento, la solidez y madurez, la estabilidad y el amor de la familia
nos nutre y llena. Es tiempo de enseñar nuestras experiencias de compartirlas, época
de ser abuelos y relacionarnos con nuestros nietos, de demostrar nuestra maestría
en la vida. La edad de oro. Ahora se encuentra satisfacción a todo lo que se
hace, ya no representa más una obligación. Somos más libres de actuar, y de
movernos. O por el contrario podemos estar peleando con la vida, con el
gobierno, con la familia, con el vecino, etc. Aquí están muchos que se
identifican con el rol de victima al sentir que su vida y talentos se fueron de
sus manos como agua.
Para sintetizar, donde
tengamos a Saturno en nuestra carta natal, es donde encontraremos oportunidades
de solidez, de estructurar nuestra vida. Aun que es importante decir que el
signo y la casa donde esta nuestro Saturno natal es donde más restricción
podemos sentir, más temor a enfrentar y sobrellevar la experiencia. Pues bien,
ese lugar siempre será el que implique mayor reto personal, por tanto también
mucho mayor satisfacción. De ninguna
manera entiendo a Saturno como maléfico,
sino como un Maestro.
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